Habia llegado de Versalles hace poco. Sus padres no sabian que habia huido. O tal vez si, les dejo la carta pero no sabia si ya la habian leido. No importa, ya estaba lejos de ellos.
Se bajo de la limosina. Charles, el chofer, se bajo del auto y me bajo las valijas. No pude evitar abrazarlo. Era mi mejor amigo aparte de mis hermanos en esa horrible casa.
-Te extrañare Charles gracias por todo- agradeci sonriendo.
Me sonrio y me devolvio el abarazo.
-Soignez-lui et on portez un bien, avouir mademoiselle (Cuidese y portese bien, adios señorita)- me dijo. Yo solo asenti y lo vi alejarse de vuelta a casa.
Suspire y me sente en mi valija esperando que alguien llegara para orientarme.